Un domingo entre triste y sucio
Cae la noche de un lunes cualquiera, de un mes de marzo en el que los primeros días nos recordaron a enero y ahora nos arrastran a finales de mayo, de un año que quedará diluido en nuestros recuerdos cuando pasen uno o dos lustros.
Sin
embargo, hoy, lunes 13 de marzo de 2023, todo el mundo sigue hablando del asesinato
la madrugada del domingo en mi barrio, de los altercados del mediodía, mientras
la policía registraba el piso del presunto asesino.
La
mañana del domingo con la ignorancia de lo sucedido me fui a dar la “Vuelta al
Valle”, con subida incluida a la “Piedra del Rey Moro”, algo imprescindible
para todos los toledanos y muy recomendable para los que visitan nuestra ciudad.
Al coger el coche para volver al barrio, en el informativo de las doce escucho
la noticia por primera vez. Me quedo entre aturdido y sorprendido. Después de
una larga ducha reparadora, el aperitivo llega con más noticias, a partir de
ahí la radio, insustituible en mi vida, fue mi nexo con el exterior; las redes sociales
comenzaron a escupir información, no siempre cierta. Mi pareja y yo comentamos los hechos. Mientras
degustábamos un riquísimo arroz sucedían los altercados a un kilometro y medio
de casa. Después de comer mi hijo pone en el grupo de la familia los primeros
videos y aconseja no salir de casa, cosa que él no cumple. Siguen llegando
videos por whatsapp.
Foto de la Web de la Cadena Ser. |
Me
indigno, creo que todo es culpa de la Mala Educación, del mundo de mierda en el
que estamos inmersos, aunque, nunca debemos olvidar, que tiene cosas
maravillosas que, muchas veces, no somos capaces de apreciar. No quiero ser negativo, pero es cierto que
todos tenemos nuestra parte de responsabilidad. La Educación, lo pongo en
mayúsculas, tiene que nacer en las casas, en todas las casas, desde las
familias más humildes a las más privilegiadas económicamente. Las familias
trabajadoras tenemos recursos, entre ellos, una magnifica Educación Pública,
seguro que mejorable, pero es un lujo al alcance todos. Muchas personas de mi
generación somos lo que somos gracias a esa maravillosa Educación Pública, a la
que fuimos en EGB, bachillerato y universidad. ¿Por qué para muchas familias la
Educación no es ese sueño increíble para prosperar? Prosperar en todo, no sólo económicamente.
Un
rato de descanso y después la tarde primaveral avanza leyendo Madrid 1945: La noche de los Cuatro Caminos
de Andrés Trapiello, un libro que me tiene intrigado y fascinado.
Después
de cenar vemos otros videos de lo sucedido; nos ponemos una película y vuelvo a
leer antes de ir a despedir, a las tres y media de la madrugada, a mi hija que
viaja, con el Instituto Público "Alfonso X El Sabio", a Alemania. A las cuatro y cuarto me
meto en la cama, me queda un rato cortito para soñar, pero lo aprovecho.
David Calvo