martes, 14 de marzo de 2023

Un domingo entre triste y sucio

 Un domingo entre triste y sucio

Cae la noche de un lunes cualquiera, de un mes de marzo en el que los primeros días nos recordaron a enero y ahora nos arrastran a finales de mayo, de un año que quedará diluido en nuestros recuerdos cuando pasen uno o dos lustros.

Sin embargo, hoy, lunes 13 de marzo de 2023, todo el mundo sigue hablando del asesinato la madrugada del domingo en mi barrio, de los altercados del mediodía, mientras la policía registraba el piso del presunto asesino.

La mañana del domingo con la ignorancia de lo sucedido me fui a dar la “Vuelta al Valle”, con subida incluida a la “Piedra del Rey Moro”, algo imprescindible para todos los toledanos y muy recomendable para los que visitan nuestra ciudad. Al coger el coche para volver al barrio, en el informativo de las doce escucho la noticia por primera vez. Me quedo entre aturdido y sorprendido. Después de una larga ducha reparadora, el aperitivo llega con más noticias, a partir de ahí la radio, insustituible en mi vida, fue mi nexo con el exterior; las redes sociales comenzaron a escupir información, no siempre cierta. Mi pareja y yo comentamos los hechos. Mientras degustábamos un riquísimo arroz sucedían los altercados a un kilometro y medio de casa. Después de comer mi hijo pone en el grupo de la familia los primeros videos y aconseja no salir de casa, cosa que él no cumple. Siguen llegando videos por whatsapp.

Foto de la Web de la Cadena Ser.

Me indigno, creo que todo es culpa de la Mala Educación, del mundo de mierda en el que estamos inmersos, aunque, nunca debemos olvidar, que tiene cosas maravillosas que, muchas veces, no somos capaces de apreciar.  No quiero ser negativo, pero es cierto que todos tenemos nuestra parte de responsabilidad. La Educación, lo pongo en mayúsculas, tiene que nacer en las casas, en todas las casas, desde las familias más humildes a las más privilegiadas económicamente. Las familias trabajadoras tenemos recursos, entre ellos, una magnifica Educación Pública, seguro que mejorable, pero es un lujo al alcance todos. Muchas personas de mi generación somos lo que somos gracias a esa maravillosa Educación Pública, a la que fuimos en EGB, bachillerato y universidad. ¿Por qué para muchas familias la Educación no es ese sueño increíble para prosperar? Prosperar en todo, no sólo económicamente.

Un rato de descanso y después la tarde primaveral avanza leyendo Madrid 1945: La noche de los Cuatro Caminos de Andrés Trapiello, un libro que me tiene intrigado y fascinado.

Después de cenar vemos otros videos de lo sucedido; nos ponemos una película y vuelvo a leer antes de ir a despedir, a las tres y media de la madrugada, a mi hija que viaja, con el Instituto Público "Alfonso X El Sabio", a Alemania. A las cuatro y cuarto me meto en la cama, me queda un rato cortito para soñar, pero lo aprovecho.

David Calvo