San
José y el Niño, 1597-1598, El Greco. Óleo sobre lienzo, 289 x 147 cm. Capilla de
San José, Toledo.
La
decoración de la capilla de San José, en Toledo, fue un encargo realizado por
el erudito D. Martín Ramírez de Zayas, catedrático de Teología de la
Universidad de Santa Catalina. Su fundación se destinada a capilla panteón para
él y sus padres. Por tanto, es un oratorio privado que se pone bajo la advocación carmelita
de San José.
El
Greco firmó el contrato en 1597 y comprendía un ambicioso programa de tres
retablos con sus consiguientes pinturas y esculturas. Lamentablemente, menos los lienzos, todo
fue rehecho posteriormente.
San
José con el Niño es una de las realizaciones más tiernas y bucólicas del
pintor. Estilo cercano a la idealización y un equilibrio clásico muy cercano al
arte italiano.
El
contexto social y espiritual de finales del siglo XVI explica que El Greco
conciba a San José como joven y decidido. Exaltación de los santos trabajadores
en una España donde muchos querían ser hidalgos para no realizar trabajos
manuales.
Con
una mano sostiene el bastón y con la otra cobija al Niño que le abraza con
amor. En la parte superior del cuadro, el coro de ángeles, en vertiginoso
movimiento y escorzos, juegan con guirnaldas de rosas y laurel, alusión de la
sabiduría del fundador. El paisaje del fondo, muy similar a la Vista de Toledo,
tan importante en muchas de sus composiciones religiosas.
David J. Calvo Rodríguez