Cuevas del Valle - Puerto del Pico. Una ruta para todos los públicos.

Día 1 de noviembre de 2013. Una ruta en familia.

Desde Cuevas del Valle (842 m) hasta la cima del Puerto de Pico (1352 m) se salvan 510 metros de altitud en unos 6 kilómetros.

Calzada Romana, Cañada de la Mesta Leonesa Occidental y Ruta de Carretería.

En Cuevas del Valle se puede comenzar la ruta en la Ermita de San Antonio. No tiene perdida, es todo cuesta arriba.

Esta calzada romana, con sus posteriores usos, ha unido la Meseta Norte con Extremadura y Toledo a través del Valle del Tiétar.

Las primeras rampas de este segmento de calzada, que unía la fortaleza romana de Abula (Ávila) con la calzada principal de Emerita Augusta-Complutum-Caesaragusta (Mérida-Alcalá de Henares-Zaragoza) a la altura de Caesarobriga (Talavera de la Reina), son de una pendiente pronunciada.

No hay que tener miedo, hasta mi hija (Cecilia) que le falta un mes para cumplir cinco años subió y bajó sin ningún problema.

 

Posteriormente,  fue ruta estratégica para de la trashumancia, un importante tramo de la Cañada Occidental Leonesa. Aún hoy sigue siendo usada para este fin.

Hasta no hace mucho tiempo esta calzada fue utilizada como vía de comunicación entre la Meseta Norte y la Meseta sur y Extremadura. Los arrieros la utilizaban para comerciar, intercambiando productos entre los dos lados de la sierra. Aun se pueden ver muy cerca del Puerto del Pico las ruinas del "Portazgo", puesto aduanero en el que se cobraba un peaje por el uso de la calzada.

 

Pocos metros antes de las ruinas del edificio utilizado para pagar el “portazgo” o “montazgo” podemos ver un pequeño pero magnifico puente.

 

Nos encontramos con bastantes monolitos de piedra que servían y sirven para señalar el camino cuando la nieve cubre la calzada.

Elena con Daniel y Cecilia.

Todos los caminos empiezan con un paso y miles de pasos nos hicieron llegar a la cumbre.

 

 

No vimos ninguna Cabra Hispánica.

Unos bocatas de jamón y lomo para reponer fuerzas. Bajar otra vez por la calzada disfrutando del paisaje hasta Cuevas del Valle.

 

 

Antes de llegar a Cuevas del Valle cogimos unas castañas.

Café, pasteles y un paseo por Cuevas del Valle.

 

Familia, historia, comida, risas,... ¿Qué más se puede pedir?

La felicidad de las cosas sencillas.

David J. Calvo Rodríguez